Las llamativas rayas de colores en los neumáticos nuevos, a menudo una curiosidad para los conductores, no tienen ninguna función especial para el usuario, ni, como se ha especulado, tienen que ver con el rendimiento de la goma. Su propósito se circunscribe al ámbito interno de la fabricación y distribución. Estas rayas sirven como códigos de producción y logística para fabricantes y distribuidores, ayudando a identificar lotes o destinos específicos, simplificando la clasificación y el envío de los neumáticos dentro de la cadena de suministro, aunque no existe un sistema de codificación universal.
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Estas marcas de color tienen fecha de caducidad y desaparecen tras unos pocos kilómetros de uso, ya que están simplemente impresas en la superficie. Para el consumidor, su presencia es una señal visual útil de que los neumáticos instalados son completamente nuevos y no de segunda mano. Una vez que las rayas se desvanecen, su función original dentro de la cadena de producción se ha cumplido.
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